Un aspecto central de la misión de Fashion for Good es reunir a todo el ecosistema en su Plataforma de Innovación, con el objetivo de detectar, fortalecer y escalar soluciones a los retos de residuos, contaminación, huella de carbono, trabajo forzado, salarios bajos y condiciones laborales inapropiadas.

En la plataforma, los innovadores pueden elegir entre el Programa de Aceleración y el Programa de Escala, donde se les dará asesorías, entrenamiento personal y acceso a una red de financiadores potenciales, además de contar con el respaldo de la red de aliados corporativos de Fashion for Good. En 2018, siete marcas se afiliaron a Fashion for Good, aumentando a 15 el número de aliados corporativos, entre los que actualmente se encuentran Adidas, Zalando, PVH Corp, Stella McCartney, Bestseller, Otto Group y Target.

Un sector en el que las principales marcas de referencia, que normalmente compiten entre sí, se unen para crear las condiciones necesarias para escalar la innovación, está enviando al mercado un aviso colectivo: que existe una fuerte demanda de este tipo de soluciones. Los aliados saben que esta colaboración tan especial les permite tanto compartir el riesgo como participar colectivamente de los beneficios de la sustentabilidad.

Esta combinación es la que hace de Fashion for Good un agente tan poderoso. Por una parte, refuerza la oferta de cada nueva empresa, a la vez que envía una señal inequívoca al mundo de los inversionistas, desencadenando una espiral ascendente de demanda y financiamiento en la industria y favoreciendo las condiciones para el éxito en un entorno complejo. De ello se deduce que Fashion for Good no se limita a cubrir una laguna de financiamiento existente en el entorno inversionista tradicional, sino que está impulsando al mercado hacia adelante. Atraer a los aliados corporativos adecuados ha sido crucial a la hora de poner en marcha este cambio.

Prueba de ello es que, en 2018, los innovadores de Fashion for Good han obtenido más de 20 millones de euros en financiamiento adicional proveniente del sector privado. Todo un logro, si tenemos en cuenta las complejidades que supone atraer inversión privada a una industria considerada de riesgo y con márgenes relativamente reducidos.

Junto con sus aliados corporativos, Fashion for Good ha logrado también poner en marcha conjuntamente 15 nuevos programas piloto. Uno de ellos, el piloto Organic Cotton Traceability (Trazabilidad del Algodón Orgánico), liderado por el innovador Bext360, reunió una mezcla singular de organizaciones; atrayendo además a marcas ya afiliadas, como Kering, Zalando, PVH Corp y C&A, a proveedores de tecnología, Fundación C&A, la plataforma multimarca Organic Cotton Accelerator (OCA) y el fabricante Pratibha Syntex. Estos datos muestran que Fashion for Good no es solamente una plataforma orientada a consolidar innovadores y a buscar soluciones para sus afiliados; es, además, un catalizador de nuevas colaboraciones dentro del conjunto de la industria.

Ahora que Fashion for Good ha atraído una masa crítica de aliados corporativos, además de contar con colaboradores de todos los ámbitos del sector, su potencial para escalar innovaciones no puede sino continuar creciendo.

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